¿Con cuál valor tomas tus decisiones?






¿Con cual valor tomas tus decisiones?
El instinto o los principios

    
     En la vida estamos parados constantemente en una encrucijada, dos son los caminos que pueden guiar la manera como abordamos una situación, en esta oportunidad analizaremos estos valores.

     Las situaciones que nos ocurren no son más que el reflejo claro de los aprendizajes que necesitamos para superarnos en la vida, si lo vemos de esa manera podemos volver a elegir constantemente lo que deseamos ver, sino vamos a observar un caos donde no tengo control sobre nada y soy una “victima”, en ambas tomo la decisión yo.

     Cuando decimos “La situación me llevo a eso” lo hacemos porque nos decantamos por el instinto, esa parte natural de nosotros que nos dice “hay que hacerlo, no queda más remedio” y es que lo que llamo instinto no es más que los deseos.

     Los deseos nos “llevan” de la mano pero al igual que hacernos la victima estamos tomando una decisión, cuando actuamos con principios estamos tomando una decisión desde los valores que nos formaron sobre lo que es adecuado para la situación, es posible que en este momento tengamos la duda ¿Qué será adecuado? ¿Quién decide que es lo bueno y lo malo? Un camino corto para tomar decisiones de acuerdo a los valores es preguntarse ¿Esta decisión que tomaré se parece a lo que quiero ser?.

Por ejemplo en alguna oportunidad un amigo tuvo problemas en una relación de pareja y fue tan intenso que sintió el deseo de golpear a quien era su pareja del momento, sin embargo me dice: “Yo mejor me separo de ella porque estoy tomando unas decisiones que no se parecen a mi” Es decir, si tomaba la decisión de golpearla (dejarse llevar por su instinto) se estaba alejando de sus valores y principios.

Si deseamos ser personas honradas, justas, constantes pues ya tenemos los valores que van a guiar nuestras decisiones y ante la posibilidad de actuar de manera deshonrosa, injusta e inconstante nos preguntaremos ¿Esto se parece a lo que quiero ser?

En este punto el trabajo es absolutamente personal, no podemos bajo ninguna circunstancia creer que estamos por encima de alguien que tome una decisión basada en sus instintos porque ambas (instinto y principios) son parte de nuestra naturaleza humana y juzgar a los otros no tiene sentido, es posible que tengamos alguna vez que tomar decisiones por algo que quizás no lo tenemos como valor pero que en ese momento necesitamos vivir, por tanto, instintos y principios son necesarios, nunca excluyentes.


Tu vida no es más que una serie de decisiones, deja de ver lo que tienes frente a ti como una causa que motive tus acciones, al contrario, toma la decisión hoy de cambiar aquello que ves y que se parezca más a eso que aspiras, respeta profundamente lo que hagan los otros, deja que cada quien viva sus experiencias, el amor es el valor más grande de nuestra vida utilízalo para respetar y valorar lo que ves.

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